Dad gracias al Señor,
El es bueno;
porque para siempre
es su misericordia.
Salmos 118:1
Hoy es un día especial, un día maravilloso para dar gracias a Dios por todo lo que hemos recibido de su mano, su fidelidad y su gracia. ¿Te has preguntado alguna vez qué hubiese sido de ti si la misericordia y el amor de Dios no te hubiesen alcanzado?
Pensar en nuestra vida y todo lo que hemos recorrido, la manera en cómo hemos sido guiados y cómo las alas del Dios altísimo nos han mantenido seguros, las veces que estando tan enfermos Dios nos ha sanado, esos momentos de dificultad en lo que el Señor ha venido en
nuestro auxilio, con provisión, restauración y perdón, pensar en que en momentos de angustia y también en los de alegría El Señor ha estado a nuestro lado. ¿No es este un día oportuno para meditar en su poder?
Este es un día perfecto para proclamar la salvación tan grande del Señor, para proclamar su nombre, para dar gracias por todas las bendiciones obtenidas y las oportunidades que hemos recibido de su mano. Hoy que cumplo 43 años puedo decir que "estoy completa porque has llegado tú, oh Cristo.
Tú eres mi Señor, mi fuerza, mi guia, mi padre y el dueño de todo mi ser. El amor que puedo brindar a los demás es posible gracias a ese amor depositado por ti en mi corazón".
Hoy es un día perfecto para levantarnos agradecidos.
Dios te bendiga.
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